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Esta prueba verifica la infección de transmisión sexual por VIH. Todo el proceso se puede llevar a cabo desde la comodidad del hogar y los resultados son confidenciales. De todas formas, si lo prefieres puedes acudir a realizar el procedimiento a algunas de nuestras clínicas.
El virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) es un virus de ARN que ataca al sistema inmunitario de la persona infectada. En concreto, se multiplica dentro de los linfocitos CD4 y los destruye, lo que provoca que el paciente sea más proclive a padecer infecciones oportunistas. Cuando pasa mucho tiempo tras la infección, no se trata y el conteo de linfocitos CD4 es demasiado bajo (-200 por milímetro cúbico de sangre), se pasa a la etapa de SIDA.
Esta prueba se utiliza para detectar el material genético del VIH en la sangre mediante una RT-PCR, lo que confirma la infección. Debido a que no depende de la seroconversión del paciente, permite la obtención de resultados fiables con un periodo ventana mucho menor que las pruebas de anticuerpos convencionales. También disponemos de una consulta médica avanzada en caso de que desees completar el servicio.
La infección por VIH se presenta en 3 etapas: aguda, crónica y síndrome de la inmunodeficiencia adquirida (SIDA). Los síntomas asociados a la primera fase son similares a los que podrían aparecer durante un cuadro de gripe. La fase crónica es asintomática, mientras que los signos del SIDA corresponden a la aparición de infecciones oportunistas derivadas de la inmunosupresión.
Independientemente de la fase, algunos de los síntomas que más se asocian a la infección por VIH son los siguientes:
La extracción de muestra se realizará en clínica por nuestros profesionales.
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