10 enfermedades causadas por virus

La evolución de los seres vivos es una constante carrera armamentística. Mientras que los animales “presa” son sometidos a la selección natural para evadir a sus depredadores, los grandes carnívoros desarrollan estrategias más eficaces para poder comer cada día y expandir su linaje. Esta carrera por la supervivencia se ejemplifica muy bien cuando vemos a una gacela correr de un león, pero hay un mundo microscópico en el que también se desarrolla una batalla constante, igual o incluso más importante.

Los virus son agentes microscópicos acelulares (no formados por células) que requieren la maquinaria de replicación de un hospedador para expandirse por el cuerpo y el entorno. Son infecciosos por naturaleza, pues por sí mismos son incapaces de multiplicarse. Casi no pueden considerarse como seres vivos: están formados por material genético y proteinas, pero carecen de la organización celular mínima que configura la vida.

Existen unas 219 especies de virus capaces de infectar al ser humano, y cada año se descubren 3-4 nuevas. A medida que nuevos agentes víricos se describen y otros mutan para sortear las defensas del sistema inmunitario, nosotros nos adaptamos en una carrera armamentística constante para combatirlos, ya sea a nivel de barreras biológicas o en el terreno farmacológico. Con este apasionante concepto en mente, te mostramos 10 enfermedades causadas por virus.

1. Catarro o resfriado común

El catarro es la enfermedad causada por virus por excelencia. Esta infección de las vías respiratorias altas está causada por rinovirus y parainfluenza en el 20 % de los casos, aunque más de 200 cepas de agentes víricos son capaces de generar síntomas compatibles con el resfriado común. Sus signos son más que conocidos: tos, estornudos, obstrucción nasal y malestar general, entre otros.

Un adulto se infecta por un virus del resfriado común de 2 a 6 veces al año, mientras que un niño lo hace de 6 a 10. Vamos más allá, pues este cuadro es responsable del 40 % del absentismo laboral y del 30 % del absentismo escolar. Los picos epidemiológicos del catarro en invierno y otoño se explican más por cambios comportamentales (hacinamiento y convivir en espacios cerrados) que por la naturaleza biológica de los propios virus.

2. Gripe

La gripe y el resfriado no son lo mismo. Mientras que el cuadro anterior puede estar causado por múltiples agentes, la gripe encuentra su causa en solo dos virus: influenzavirus A o influenzavirus B, ambos pertenecientes a la familia Orthomyxoviridae. Los síntomas son diferentes y algo más incapacitantes que en el catarro, sobre todo si tenemos en cuenta que en este caso sí hay una fiebre patente presente y mayor indisposición general.

Las epidemias anuales de gripe infectan hasta al 20 % de la población, lo que la convierte en una de las enfermedades causadas por virus más prevalentes. Además, en personas ancianas o con inmunosupresión derivada de otra enfermedad, existe la posibilidad de padecer complicaciones como neumonías o problemas cardiovasculares. Fuentes estadísticas estiman que la gripe causa hasta 518 000 muertes anuales.

3. Infección por VIH

El virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) no requiere ningún tipo de presentación. Desde su descubrimiento, más de 80 millones de personas se han visto afectadas por esta infección de transmisión sexual (ITS) y unas 40 millones han muerto por complicaciones derivadas. Este agente vírico es muy especial a nivel científico, pues se reproduce dentro de linfocitos del sistema inmunitario de los humanos, destruyéndolos en el proceso. Si no se recibe tratamiento, con el paso de los años causa inmunosupresión grave.

La infección por VIH se divide en 3 fases: aguda, crónica y síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA). El SIDA se diagnostica cuando el conteo de linfocitos CD4, las células afectadas, es menor de 200/mm3 de sangre. Este estado marca una inmunosupresión severa en la que infecciones leves pueden llegar a causar la muerte. Por suerte, si se lleva a cabo la terapia antirretroviral a rajatabla, las personas VIH-positivas pueden llevar una vida normal y alcanzar una tasa de supervivencia similar a la de la población general.

4. Sarampión

El sarampión es una de las enfermedades causadas por virus más famosas por su capacidad infectiva. Este cuadro, provocado por un virus de la familia de los paramixovirus transmitido a través del contacto directo y el aire, ha matado a más de 200 millones de personas en su etapa pandémica en el pasado. Uno de los grandes peligros de esta enfermedad es su facilidad de transmisión, pues se estima que alguien enfermo es capaz de infectar a 12-18 personas de media hasta que su cuadro se resuelve.

Por suerte, a día de hoy existe una vacuna que protege de forma simultánea frente al sarampión, las paperas y la rubeola. Se administra en forma de una primera dosis a los 12-15 meses, seguida de otra dosis a los 4-6 años. Es una vacuna extremadamente eficaz y segura que previene la enfermedad en más del 97 % de los casos.

5. Ébola

Quizá ahora menos nombrada, esta es una de las enfermedades causadas por virus que más revuelo y desgracia han causado en el mundo en tiempos recientes. La enfermedad por el virus del Ébola (Ebolavirus) cursa inicialmente con fiebres, dolores de cabeza, malestar articular y más, pero luego evoluciona a una fase hemorrágica con sangrado por boca/recto, ojos, oídos, nariz y una insuficiencia orgánica grave. Esta infección es muy grave y presenta una tasa de mortalidad del 50-90 %.

Por suerte, a día de hoy existe una vacuna preventiva contra el ébola, aprobada para uso médico en la Unión Europea en noviembre de 2019. Se administra por vía muscular en forma de inyección única en personas de 18 años o más que están en riesgo de contraer la enfermedad. Cabe destacar que reporta ciertos efectos secundarios.

6. Hepatitis B

Tal y como su propio nombre lo indica, la hepatitis B es una enfermedad infecciosa causada por el virus de la hepatitis B. En la mayoría de los casos, este cuadro es de corta duración (hepatitis aguda) y tiene una duración menor a los 6 meses. Alrededor del 2-6 % de los adultos desarrollan una variante crónica mucho más grave, pero hasta el 90 % de los niños infectados terminan también en un cuadro crónico.

En la hepatitis crónica, la infección permanece en el cuerpo porque el sistema inmunitario es incapaz de combatirla. Esta variante de la enfermedad puede durar toda la vida y provocar daños graves, como cirrosis hepática y cáncer de hígado. La mayoría de las personas con hepatitis crónica requieren fármacos de por vida para manejar la enfermedad, como medicamentos antivirales o inyecciones de interferón.

7. Fiebre amarilla

El virus de la fiebre amarilla es una causa importante de enfermedad hemorrágica (más allá del ébola) en muchas regiones de África y América del Sur. Puede presentarse con una forma febril leve y autolimitada o, en su defecto, llegar hasta una hemorragia del hígado con una tasa de letalidad del 50 %. Recibe su nombre porque la ictericia o amarilleamiento de la piel forma parte de sus síntomas.

La fiebre amarilla es transmitida por la picadura de mosquitos de los géneros Aedes, Haemagogus y Sabethes. Por suerte, y al igual que en otros casos de la lista, existe una vacuna que protege a las personas que se la administran en un 99 % al mes de vacunarse. La inmunidad otorgada parece durar toda la vida.

8. Poliomielitis

La poliomielitis es una enfermedad incapacitante y potencialmente mortal provocada por el poliovirus. La mayoría de las personas infectadas por este agente patógeno no desarrollan síntomas, pero 1 de cada 4 afectadas mostrarán un cuadro clínico con sintomatología de tipo gripal, que incluye fiebre, dolor de garganta, cefaleas, náuseas y malestar estomacal. Una proporción menor de pacientes puede desarrollar meningitis (inflamación de médula espinal o cerebro) y parálisis.

1 de cada 200 infecciones produce una parálisis irreversible y del 5 al 10 % de las personas que llegan a este punto fallecen por parálisis en la musculatura respiratoria. La vacuna contra la poliomielitis ha hecho que prácticamente la humanidad se pueda olvidar de ella, pues tal y como indica la Organización Mundial de la Salud (OMS) su incidencia se ha reducido en un 99 %. En el año 2021 solo se notificaron 6 casos, en comparación con los 350 000 de 1988.

9. Rabia

La rabia es una de las enfermedades causadas por virus capaz de causar encefalitis en seres humanos y otros mamíferos. El miedo al agua (hidrofobia) es el síntoma más común de la enfermedad, aunque también cursa con babeos, convulsiones, cambios en el estado de ánimo, espasmos musculares, fiebre baja, inquietud, dificultad para tragar y alucinaciones. Esta infección es famosa por la disfunción cerebral y agitación que causa.

Cabe destacar que este virus se transmite a través de la saliva de animales infectados, en general a partir de una mordida. Tiene una tasa de mortalidad relativa de casi el 100 %, pero se puede evitar a través de la vacunación. El 95 % de los cuadros se transmiten a partir de perros infectados, algo a tener en cuenta a la hora de establecer programas preventivos.

10. COVID-19

La enfermedad por coronavirus de 2019, mejor conocida como COVID-19, es una patología infecciosa causada por el virus SARS-CoV-2 que tampoco requiere ningún tipo de presentación. Con más de 670 000 000 de casos confirmados en todo el mudo a día de hoy y casi 7 000 000 de muertes a sus espaldas, este virus nos ha enseñado que continuamos siendo animales en una constante carrera armamentística contra los virus y parásitos que nos rodean.

Uno de los mayores riesgos de este virus y sus distintas cepas es su transmisibilidad. Por ejemplo, una persona infectada con la variante Omicrón BA.5 infecta de media a 18,6 personas hasta recuperarse. De todas formas, a medida que la capacidad de transmisión del virus ha ido aumentando con cada variante, su letalidad ha disminuido. Además, las vacunas y los esfuerzos globales han ayudado a que esta pandemia sea hoy en día casi un recuerdo.

Estas son solo 10 enfermedades causadas por virus, pero existen muchísimas más. A medida que el mundo se interconecta y globaliza, las enfermedades emergentes encuentran un caldo de cultivo excelente para saltar de persona a persona y crear auténticas pandemias, como es el caso del COVID-19. De todas formas, la ciencia y la inteligencia humana son un gran enemigo a combatir, pues las vacunas producidas por nuestra especie en las últimas décadas han salvado literalmente millones de vidas.

Si algo queda en claro al terminar este espacio es que, por mucho que nos alejemos de la selección natural, seguimos siendo animales susceptibles a ser parasitados, ya sea por virus, por bacterias, por hongos o por otros muchos microorganismos. Aun así, nuestra capacidad de adaptación se ha mostrado (hasta ahora) por delante de los mecanismos evolutivos de los patógenos que han dominado las últimas pandemias.

Compra tu prueba

En VIVOLABS, estamos especializados en el diagnóstico de enfermedades de transmisión sexual, tanto de origen vírico como bacteriano. En nuestros análisis, incluimos el VIH y el virus de la hepatitis B aquí citados, además de otros muchos agentes patógenos. No se requiere ni cita previa ni receta médica para llevarlos a cabo.

Samuel

Redactor de contenidos y divulgador científico en grupo VIVO.

Redactor científico con más de 3 años de experiencia en divulgación en diversos portales web. Graduado en biología, con máster en zoología y especializado en biología sanitaria.