Las emergencias médicas son enfermedades o lesiones de naturaleza aguda que suponen un peligro inmediato para la persona que las experimenta o, en su defecto, una amenaza para la salud a largo plazo. Este tipo de eventos clínicos suelen requerir el abordaje rápido por parte de un profesional en salud con el fin de estabilizar al paciente y evitar tanto la muerte como daños irreversibles.
Diversos fallos en órganos y sistemas (cardiovascular, digestivo, neurológico y más) pueden poner en peligro la vida de una persona, pero en muchos casos la situación límite se puede abordar adecuadamente si los primeros signos clínicos se detectan a tiempo. En las siguientes líneas, te mostramos 10 síntomas de una emergencia médica.
1. Sangrado abundante que no cesa
Puede parecer obvio, pero un sangrado abundante que no cesa es señal clara de que algo no va bien, ya sea dentro del propio organismo o como producto de un accidente. Es natural sangrar y asustarse tras un corte o un golpe fuerte, pero hay que buscar atención médica inmediata si:
- Controlar el sangrado es imposible, incluso tras haber tomado las medidas de atención primaria pertinentes (desinfectar, poner gasas, vendas y más).
- Un objeto ha quedado incrustado en la lesión sangrante o esta se percibe mucho más profunda de lo normal.
- Se puede ver tejido muscular y/o huesos a través de la herida.
Perder entre el 30 y el 50 % del volumen sanguíneo puede derivar en la muerte, pues el corazón pierde su capacidad de bombeo y, por lo tanto, los tejidos y órganos dejan de oxigenarse y también comienzan a fallar. Este evento fatal suele ir precedido de síntomas como palidez de la piel, confusión, desmayos y otros signos que indican una clara falta de sangre en el cuerpo.
2. Problemas respiratorios
Los problemas respiratorios ocurren cuando el paciente siente que no puede conseguir suficiente aire mediante inspiración-espiración, siente una presión en el pecho o una sensación de ahogamiento inminente. Puede ser señal de diversas patologías, entre las que destacan las siguientes:
- Enfermedades del sistema respiratorio, como una crisis asmática o una enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) avanzada.
- Patologías cardíacas, como ataque al corazón, accidente cerebrovascular, angina de pecho y más.
- Infecciones en las vías respiratorias, como bronquitis, neumonía, tuberculosis o COVID-19.
- Problemas psicológicos, como ansiedad crónica o un ataque de pánico.
Aunque la dificultad para respirar en contadas ocasiones se considere natural (por ejemplo, al hacer ejercicio extenuante), en la inmensa mayoría de los casos ejemplifica una emergencia médica que debe abordarse de inmediato.
3. Cambios en el estado mental
Ciertos cambios en el estado mental, como comportamiento errático, confusión, dificultad para concentrarse o “niebla mental” generalizada son síntomas de una emergencia médica. Estos signos son indicio de intoxicación, tumores cerebrales, traumatismo craneoencefálico, desequilibrio electrolítico, bajos niveles de oxígeno en sangre, deficiencias nutricionales severas, hipotermia, accidente cerebrovascular y mucho más.
4. Desmayo
El desmayo es la pérdida momentánea y súbita del conocimiento causada por una disminución del flujo sanguíneo al cerebro. En contra de lo que se suele creer, una persona no pierde el conocimiento a menos que se alteren las funciones cerebrales. Esto puede ocurrir por varias causas, algunas más severas que otras:
- Emociones muy fuertes.
- Calor o deshidratación.
- Descenso en los niveles de azúcar en sangre.
- Uso de ciertos fármacos.
- Trastornos de las válvulas del corazón.
- Frecuencia cardíaca alterada.
- Infarto de miocardio y otros problemas en el músculo del corazón.
- Obstrucción de las arterias pulmonares.
En muchos casos el desmayo no es motivo de preocupación, pues puede responder a un evento muy concreto no asociado a enfermedades (como recibir una noticia muy mala o exponerse a una fobia). De todas formas, se convierte en signo de que algo no va bien en personas con ciertas patologías existentes, como problemas del corazón.
5. Toser o vomitar sangre
La tos con sangre (hemoptisis) y el vómito con sangre (hematemesis) son signos clínicos de que se está produciendo sangrado en alguna parte dentro del cuerpo, especialmente en las vías respiratorias y/o aparato digestivo. La hemoptisis, aunque muy alarmante, es común en enfermedades de naturaleza relativamente leve, como la bronquitis vírica o las infecciones respiratorias. De todas formas, también puede ser señal de un cáncer de pulmón, infecciones fúngicas pulmonares letales, embolia pulmonar o granulomatosis.
La hematemesis, por su parte, suele estar causada por una úlcera sangrante en el estómago, varices esofágicas o trastornos sanguíneos del corazón, entre otras condiciones. Algunas veces es difícil diferenciar la hematemesis de la hemoptisis, por lo que en todos los casos se requiere acudir a la sala de urgencia ante este signo clínico.
6. Asfixia
La asfixia ocurre cuando una persona no puede respirar porque las vías aéreas superiores, como la tráquea, están bloqueadas con alimentos u otros objetos. Este signo puede aparecer por comer demasiado rápido, consumo excesivo de alcohol, inhalación de vómito, lesiones en cabeza/cara, agrandamiento de las amígdalas, problemas en el esófago y mucho más. Esto puede derivar en una pérdida de conocimiento por la incapacidad derivada para respirar.
7. Dolor en el pecho
El dolor en el pecho puede manifestarse de muchas maneras, desde un pinchazo puntual a un malestar sordo y constante. Aunque se suela asociar a un infarto (y con razón), también puede tener otras muchas causas, como la acidez estomacal, la rotura de una costilla, los trastornos de deglución y diversos problemas en el páncreas o la vesícula biliar. Si bien no todas las causas de este síntoma sean graves, se requiere atención sanitaria inmediata para descartar una emergencia médica.
8. Dolor repentino y severo en cualquier parte del cuerpo
Aunque el dolor de pecho represente uno de los síntomas principales de una emergencia médica, el dolor repentino y severo general en cualquier sección del cuerpo también es motivo de preocupación. Esta sensación es subjetiva y no todas las personas la perciben de la misma forma, pero en general es hora de acudir a urgencias si el malestar impide la realización de tareas diarias y es incapacitante.
9. Sentimientos de suicidio o asesinato
No todos los síntomas y signos de una emergencia médica se manifiestan a nivel corporal. Por motivos obvios, la ideación de quitarse la vida o la de acabar con otra persona son motivos de urgencia y se requiere atención inmediata. Estos pensamientos se pueden acompañar de otros eventos que evidencian un problema psiquiátrico, entre los que se encuentran los siguientes:
- Retirarse de situaciones sociales.
- Sentimiento de presión y aprisionamiento en ciertas situaciones.
- Cambios drásticos en la rutina, ya sea de sueño, comida u otros.
- Incremento en el uso de alcohol y otras drogas.
- Cambios drásticos en las emociones y personalidad.
Aunque las ideaciones suicidas y otros sentimientos asociados puedan parecer “incurables”, se pueden abordar con psicoterapia, fármacos, terapia de desintoxicación y mucho más. Llamar a teléfonos de prevención o acudir directamente a urgencias se hace esencial en estos casos.
10. Otros síntomas de una emergencia médica
En este listado extenso, hemos citado un total de 9 síntomas de una emergencia médica. De todas formas, existen muchos más que deben ser nombrados, al menos de forma somera:
- Malestar abdominal inusual.
- Fiebre superior a 39,4 °C.
- Inflamación notable en el abdomen o vientre.
- Dolor de cabeza grave.
- Debilidad repentina.
- Pérdida de la sensibilidad.
- Incapacidad para realizar movimientos correctamente.
- Pérdida repentina de coordinación.
- Convulsiones.
- Problemas de visión repentinos.
- Incapacidad repentina para mantener la comunicación.
- Sudoración fría repentina.
- “Caída” de un lado de la cara.
- Presión arterial muy baja.
Como puedes ver, los síntomas de una emergencia médica son muy variados. Aunque en muchos casos estos signos clínicos no se asocien a cuadros de vida o muerte, en terrenos de salud siempre es mejor prevenir que curar. Ante cualquiera de ellos te recomendamos buscar atención médica inmediata, sobre todo si tienes un historial patológico.
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Redactor de contenidos y divulgador científico en grupo VIVO.
Redactor científico con más de 3 años de experiencia en divulgación en diversos portales web. Graduado en biología, con máster en zoología y especializado en biología sanitaria.
